Cerveza especial
compuesta en un 50% de cerveza de trigo y el otro 50% por refresco de
pomelo. Mucha espuma, blanca y jabonosa, que disipa rapidísimo hasta
quedar una corona bastante ancha. Cuerpo ligero, de color
anaranjado-amarillento, translúcida casi opaca, con mucha burbuja
muy viva pero que pierde pronto fuerza. El aroma es, simplemente,
pomelo. El sabor es pomelo y un ligero regusto a pan, aunque apenas
se notan las maltas, algún cítrico más cuya acidez se potencia con
la levadura, y un regusto de lúpulo muy afrutado. El final es dulce,
muy afrutado y deja una sensación algo pastosa. Poco alcohol, 2,5%.
Muy refrescante.
Técnicamente es una
clara (o como gusta llamarles ahora, una radler), aunque ni la
cerveza de trigo ni el refresco de pomelo sean los más habituales
para hacerla, por tanto, servir muy fría en un vaso de tubo o en ese
vaso en el que nos tomaríamos, por ejemplo, una Fanta de naranja.
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