Teniendo en cuenta que el dibujo del logotipo es el Teide, no es difícil adivinar que esta cerveza tipo pilsener es canaria. Abundante espuma, blanca y esponjosa, que disipa lentamente hasta quedar cerca de un centímetro. Cuerpo ligero de color dorado claro, transparente y con muy poca burbuja, sin embargo con buena carbonatación. Poco aroma, en realidad nulo, y se intuye algo de malta bastante dulce. En el sabor destaca de entrada un lúpulo bastante potente, que se va diluyendo hasta dejar un ligero sabor a malta y cereales. El final, no muy largo es similar al sabor, empiza siendo fuerte y amargo, para irse diluyendo. Es refrescante. 4,7% de alcohol.Servir muy fría y preferentemente en un vaso alto de tubo.
Muy buena, para ser una cerveza que solo se comercializa a nivel insular, muy buena relación calidad/precio, refresca mucho y tiene un gran sabor, recomiendo su variedad de gofio de trigo, que se asemeja a una Paulaner o Franziskaner, (guardando las diferencias)
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