Marlen

Detrás de un nombre bastante sensual, se encuentra una cerveza muy normal ―desde luego, LaZaragozana ya ha hecho cosas mejores― del tipo pale lager con abundante espuma, blanca y muy esponjosa, que disipa lentamente hasta quedar una pequeña cantidad. Cuerpo de ligero a medio, de color dorado claro, transparente y con bastante burbuja muy pequeña. Aroma razonable en el que destacan la malta dulce, paja y notas herbáceas. El sabor es malta dulce con notas de maíz ―es posible que lo tenga, aunque en ningún lado de la botella pone los ingredientes― y con un lúpulo herbáceo, también deja algún destello de algo como agua estancada. El final al principio es dulce, mucha malta, para dejar paso, poco a poco, a un regusto de ese lúpulo herbáceo que se notaba en el sabor. 5,8% de alcohol.

Servir fría en jarra o vaso ancho.

La Goudale

Cerveza tipo ale de las llamadas bière de garde ―en la contraetiqueta se explica que Goudale podría venir de good ale― con una capa media de espuma, blanca y esponjosa, que se disipa lentamente hasta quedar una capa muy fina. Cuerpo medio, ligeramente oleoso, de color dorado ambarino, translucida ―no turbia― con abundante burbuja de tamaño medio. No destaca por su aroma, poco intenso, que recuerda a un vino blanco afrutado al que habría que añadir un poco de corteza de limón y un poco de levadura. El sabor es dulce, pero aún así equilibrado, con unas dosis justas de malta y un lúpulo muy afrutado, de cítricos y especias. El final es largo y se va diluyendo poco a poco en la boca, destacando en él un amargor cítrico muy interesante. Bastante alcohol, 7,2% y, a pesar de ello, bastante refrescante.

Servir fría, para acentuar su calidad de refrescante, en copa de cáliz, o incluso copa de balón, para disfrutar de un trago largo que permita paladear todos sus matices.

ACDC

Cerveza alemana con el nombre y logotipo del célebre grupo de hard rock australiano que tantos momentos de buena música ha dejado para la historia del rock. Es una pale lager elaborada según la ley de pureza alemana, con muchísima espuma, blanca y muy esponjosa, que disipa bastante rápido hasta quedar una mínima capa prácticamente transparente. Cuerpo de ligero a medio, de color dorado claro, transparente y con mucha burbuja de tamaño medio. Aroma fuerte con notas de malta y herbáceas. El sabor está muy descompensado, apenas se nota una malta muy tenue mientras que el lúpulo, floral, es muy intenso, y a esto hay que añadir unas leves notas de... miel. El final es largo y muy amargo, con ese lúpulo floral ya mencionado con notas también amargas bastante artificiales, y también algo agrio a pesar de la falta de levaduras añadidas. 5,0% de alcohol.

Servir fría en jarra o vaso ancho.